El castigo infantil jamás se olvida- AmorMaternal.com

Hoy me apetece reflexionar junto con ustedes acerca de cuán severos fueron los castigos y maltratos que recibió la generación anterior.

Las familias que nos inclinamos hacia la Crianza Respetuosa lo sabemos: somos humanos, hacemos lo mejor que podemos, buscamos siempre vencer nuestra sombra, el piloto automático que nos impulsa a repetir patrones, a tratar como fuimos tratados

Estoy segura de que muchos de nosotros hemos oído anécdotas de boca de familiares y amigos mayores en donde se evidencian distintas formas de maltrato infantil, desde la silla de pensar, hasta la humillación verbal, los golpes, el encierro, las amenazas y no doy más detalles gráficos porque realmente no hacen falta.

Son diversos los casos en que niños han fallecido de la mano {¿disciplinante?} de sus progenitores. Llegan a la prensa tradicional, nos alarmamos, y sin embargo mucha gente continúa viendo como "normal", o incluso aceptable el maltrato a los niños con la excusa de "forjar su carácter", enseñarles "cómo es la vida", "que no siempre pueden tener lo que desean", etc.


Sin embargo en esta oportunidad, me gustaría invitarles -siguiendo la idea de mi reflexión sobre el beneficio de la duda, en donde hablo de precipitarnos y no precipitarnos, y cuándo conviene hacerlo durante la crianza- a imaginarse a sus hijos viejitos, tal y como vemos a esta anciana en el video que comparto con ustedes a continuación, recordando y reviviendo los maltratos que recibió de mano de su padre.

No tengo palabras, sólo escalofríos.

El maltrato infantil nunca se olvida.


Si te ha llegado al alma, como me ha llegado a mí, si deseas propagar y concientizar más gente en cuanto a los daños a largo plazo que puede causar el castigo infantil, desde todas las dimensiones, comparte este artículo. Gracias.

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Louma Sader Bujana

Es autora de múltiples bestsellers, entre ellos Reflexiones sobre Crianza Respetuosa, y Happy Agenda, así como creadora de diversos cursos pioneros que devuelven el bienestar y la fluidez a la relación madre-hijo. Es, además de Licenciada en Odontología, con un enfoque en la educación y prevención, la fundadora de Amor Maternal, y de la Academia de la Crianza Respetuosa. Se ha especializado en marketing y emprendimiento online, ofreciendo consultoría para profesionales y pequeñas empresas.


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7 comentarios:

  1. Que triste, yo recuerdo también que de niña mis papás me pegaban de formas horribles, incluso una vez mi papá amenazó con romperme un brazo si me defendía.

    La violencia sólo engendra violencia, no se puede criar de esa manera...

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  2. Totalmente de acuerdo con el comentario. La violencia no es el camino. Hay muchas otras formas de educar a nuestros hijos. Si hacen las cosas mal deben saberlo pero hay muchas formas en las que se lo podemos demostrar fuera de la violencia.

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  3. Ese es mi miedo; cometer los errores del pasado y educar como lo hicieron conmigo, el recuerdo de mi infancia no es muy agradable, supongo que antes era habitual el uso del cinturón para castigar a los hijos por parte del padre, no lo sé, y eso que soy joven, pero lo emplearon conmigo, era una niña muy activa, me obligaba a dormir la siesta para no hacer ruido. Tengo miedo a no tener paciencia y no ser una buena madre, con mi sobrina la tengo,está para comérsela.Espero tenerla también con mis hijos....

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  4. Entonces consideras que la silla para reflexionar es mala? Muchos psicólogos la usa, y no la usan como un castigo sino como un lugar en donde el niño pueda reflexionar y aprender. Tu que opinas??

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  5. Da mucho miedo tratar a mis hijos, como yo fui tratada por mi mama. Pienso que yo tengo mas educacion, que he tenido mas buenas experiencias de las que ella tuvo en su niñez, entonces tengo tal vez mas probabilidades de ser mejor, buena con mis niños. Ahora son chicos, y siento que he hecho buen trabajo, me da miedo pensar en cuando sean adolescentes. Si he tenido momentos en que he perdido la cabeza o la paciencia, solo los veo como enemigos de mi sueño, cuando he tenido dias pesadisimos, he complacido, he atendido todas sus necesidades y en medio de la noche me despiertan y solo quieren conmigo y no con su papa, ahi no pense nada, solo siento que son una amenaza para mi, es como si no pensara nada.

    Solo ha pasado esto en dos ocasiones. Espero que no vuelva a pasar, es reconocer lo que me hace reaccionar asi y detenerlo a tiempo. Muchas personas me dicen que me admiran, que soy muy paciente, que trato muy bien a mis hijos, y me da gusto ,pero no se imaginan todo el trabajo que esto me cuesta, pero que con mucho gusto lo hago.

    Me da tanta alegria encontrar esta pagina, la encontre buscando articulos que me ayuden a guiar mis pensamientos, mis ganas de hacer las cosas bien y me encanta esto de educar con respeto.

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  6. No estoy de acuerdo con el maltrato infantil. Pero soy mamá y debo reconocer que a veces me provoca darle una palmada en el trasero a mi hijo de apenas 2 años. Incluso en la boca cuando me escupe porque no lo dejo hacer algo que el quiere y yo considero peligroso para él.
    Pues el tema no me parece en sólo convencernos que no se debe hacer, eso me parece fácil. Difícil me parece que me des opciones válidas para evitarlo y cómo proceder. Debemos reconocer también que a veces no funciona sólo hablarles y explicarles las cosas o los peligros de lo que esta haciendo. Incluso a veces tampoco sirve distraerlos de lo que están haciendo.
    Por ejemplo: mi hijo en una farmacia se me escapó de la mano y empezó a correr por la tienda, esperando que lo persiguiera. Lo menos que me preocupa es que rompa algo de la tienda. Me preocupa que salga de ella hacia la calle o que alguien aproveche la situación para llevárselo. Evidentemente cuando logré atraparlo lo regañe muy fuerte y le di una palmada en las nalgas (cubiertas con pañales). Luego me arrepentí de la palmada, pero cómo logro que entienda el peligro que corre cuando el solo lo ve como un juego divertido.
    Me parece que es un poco mas difícil que solamente decir que es maltrato y no se debe hacer, sin meternos en los estereotipos y las conductas aprendidas de nuestros padres. Pues a mi me dieron por la boca, las nalgas y hasta un correazo me lleve.

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  7. lo que pasa es que si el niño de dos años no entiende con explicaciones mucho menos va a entender por esa halagada lo único que el entiende es que su mama le pego es decir el sentimiento que le hace sentir esa nalgada así que si deja de salir corriendo de donde estas no es porque haya comprendido que no debe salir así si no que no lo hará por miedo, sin hembargo si inculcamos el habito desde chiquitos de irles explicando porque no hacer algunas cosas tarde que temprano cuando crezca te escuchara y comprenderá por convicción que no debe hacer esas cosas,mi hija hace lo mismo me patalea cuando la cargo para irnos de un lugar me ha pegado en la cara por no dejarla hacer algo peligroso cosa que no se de donde lo ha sacado si yo no le he pegado supongo que de sus amiguitos que le han pegado a ella, enseñados por mamis que les pegan a ellos por "portarse mal", así que lo que hago es explicarle aunque aun no me entienda y detenerle sus piernas o manitas para que no me pegue y perder de vista lo que le causaba la frustración ( un juguete que no es suyo, un cuchillo a la mano etc) los niños ni son malos y si hacen esos " Berrinches " pensemos que están defendiendo lo que quieren solo que aun no saben controlar sus emociones, nosotros podemos abrazarlos y decirles que comprendemos que quieran hacer esto o lo otro pero que ahorita no se puede etc etc y esa es una de las formas cada quien encontrara la forma!!

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