Cuando criamos a nuestros hijos en contravía, con respeto a sus ritmos, de forma no punitiva, nos vemos muchas veces plagados de comentarios y críticas. A menudo, estas vienen de personas que no comprenden por qué criamos de esta manera, y nos dicen cosas como el muy popular: 
"pero dale un golpe a tiempo para que aprenda", o 
"déjalo que aprenda de una vez, el mundo es muy cruel y está demasiado mal acostumbrado a tus buenos tratos, o 
"el día de mañana cuando salga al 'mundo real' te arrepentirás porque no tendrá herramientas para tratar con los demás".
Seguro que les suenan familiares...

Y yo me pregunto: ¿Qué va a aprender un niño con el famoso 'golpe a tiempo'? ¿Y qué podemos hacer ante tales comentarios? Pues creo que este video lo ilustra muy bien. Hacen una analogía usando como sujeto a un sapo. Si metemos un sapo en una cacerola de agua caliente, sabrá reaccionar, saltará y salvará su vida. Si en cambio metemos al sapo en agua fría y vamos subiendo muy gradualmente la temperatura de la cacerola, el sapo no lo notará, hasta que llegue a hervir y muera. 

Yo tengo la sensación de que al criar en brazos, respetuosamente estamos llenando al niño de herramientas emocionales (no de dependencia como tienden a pensar muchas personas), los estamos colmando de afecto y que por ello, el "shock" de entrar en "el mundo real" (como si la infancia no fuera parte de la vida real) los hará saltar, sí. Saltarán y preservarán sus criterios intactos, su personalidad, sus valores, sus creencias, su yo interno, su autoestima. Sabrán reaccionar ante situaciones perjudiciales porque conservan intactos sus instintos, su sensibilidad. Aprenderán a su debido momento de otras cosas, pero no como el sapo sumergido en agua que se calienta lentamente y deja de ser él hasta convertirse en parte del caldo sin siquiera percibirlo...

Finalmente, decir que si a algo quiero 'acostumbrar desde pequeño' a mi hijo, es a los buenos tratos, al respeto y al cariño :)


¿Qué opinan? ¿Creen que es mejor 'acostumbrarlos' desde chiquitos, o colmarlos y dejarlos 'salir al mundo' ya plenos? 

Foto © Arthur Baensch/Corbis

Louma Sader Bujana

Es autora de múltiples bestsellers, entre ellos Reflexiones sobre Crianza Respetuosa, y Happy Agenda, así como creadora de diversos cursos pioneros que devuelven el bienestar y la fluidez a la relación madre-hijo. Es, además de Licenciada en Odontología, con un enfoque en la educación y prevención, la fundadora de Amor Maternal, y de la Academia de la Crianza Respetuosa. Se ha especializado en marketing y emprendimiento online, ofreciendo consultoría para profesionales y pequeñas empresas.


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7 comentarios:

  1. Esos "acostumbramientos" desde pequeños acaban en matrimonios con malos tratos, esos tratos que han normalizado en la infancia.
    Yo tengo una teoría, y es que cando salimos de casa buscaremos lo que nos diern y nos falta: si son amor y comprensión, pues acabaremos con una pareja comprensiva y respetuosa, y si hemos estado sometidos a abusos, malos tratos, faltas de respeto, golpes y grits, es más probable que habiendo normalizado ese tratto de "quienes nos quieren", elijamos una pareja con estas últimas características.
    Además hay otra cosa, yo les doy a mis hijas lo que quiero que luego den ellas, las lleno de cosas buenas, no de mie..da, de manera que sean buenas personas hoy y el día de mañana.
    O al menos, lo intento!

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  2. Claro! yo quiero que se acostumbre a tratar y ser tratado con respeto. A ser empático, a que habrá siempre alguien que lo ama incondicionalmente, pase lo que pase... pero que también debe cuidar a los demás, en especial si son pequeños, como lo es él ahora.

    Además, y esto lo digo siendo un poco egoísta, por qué deberia privarme del amor de mi hijo, para crear una distancia entre nosotros? yo también necesito que me quiera, jiji

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  3. Claro que hay que acostumbrarlos desde pequeños, acostumbrarlos a recibir respeto, cariño y todo el amor que merecen.

    El mundo de allá afuera se puede cambiar de a poco pero suele ser duro algunas veces. Sin embargo si crias a tus hijos con amor les otorgas las herramientas para sentirse seguro y afrontar cualquier cosa que encuentren a lo largo de su vida.

    Hay que acostumbrarlos desde el día uno a unos brazos calientitos, a un pecho disponible para amamantar, a muchos besos y abrazos y a palabras calidas.

    Hay que acostumbrarlos a tratarlos con respeto aunque hayan hecho cosas que parezcan incorrectas en nuestra sociedad.

    Un beso Louma

    Susana

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  4. Por desgracia, estos comentarios son muy frecuentes todavía. A mí me recuerdan a lo que decían de que había que ir a la "mili" para hacerse un hombre.

    Todo depende de qué tipo de sociedad queramos. Si queremos perpetuar la agresividad de este mundo, lo mejor es enseñarle a los niños que las cosas se consiguen con violencia. Pero si queremos que este mundo cambie, debemos criarlos con la base del amor y del respeto, para que las nuevas generaciones puedan cambiar lo que no hemos podido hacer nosotros.

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  5. Genial Louma! Creo que una de las grandes trampas de la crianza y la educación es que pretendemos educar para la paz, el respeto, el amor, pero lo hacemos desde la violencia, el maltrato, la indiferencia y lo creemos absolutamente compatible y coherente.
    Asi que yo también prefiero "acostumbrarla" al amor, al respeto, a ser escuchada y vista, "acostumbrarla" a la risa, al juego, al disfrute, como tu bien dices de esa manera le estaré dando las herramientas necesarias para buscar su lugar y su felicidad en el mundo.
    Un beso!

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  6. Me hiciste pensar en uno de los más grandes "shocks" de mi vida. Mis padres me criaron en lo que ahora llaman "crianza con apego" (que mis papás no aprendieron en ningún lado sino que sólo se guiaron por su instinto). Crecí en una familia donde se me inculcó el respeto a los demás y la equidad.

    Cuando "salí al mundo real" a mis 21 o algo así y que comencé a ver discriminación, intolerancia y maltrato laboral contra las mujeres -en especial las mamás- algo dentro de mí "saltó". Fue un "esto no está bien, esto no me lo enseñaron, mi familia no me preparó para esto". A mí nunca me dijeron que las mujeres "deben" o "no deben" hacer algo, pero en lugar de que "el mundo real" me aplastara con su negatividad, me le enfrenté, decidida a defender mis convicciones y derechos.

    ¿Habría sido mejor que desde pequeña me hubieran inculcado el "allá afuera la gente te va a tratar como inferior por ser mujer" para que estuviera "lista" para el golpe? Creo que no, creo que el haberme criado convencida de que mi calidad de mujer no me hacía inferior a nadie me ha hecho enfrentar las adversidades con mayor firmeza ¡porque así me enseñaron! :)

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  7. Estoy totalmente de acuerdo, de hecho es necesario empezar a criar a nuestros hijos para el cambio, para que el cambio de sociedad a mejor empiece por nosotros. Pero es tan difícil conseguir que no aflore todo lo que hemos recibido en nuestra propia infancia... Castigos, mentiras, gritos, opresión, represión sexual... Es fácil perder la calma con niños...

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